Esta es la entrada número 100 de este blog. Quizás por ello el bajo Cinca nos ha regalado hoy una pequeña maravilla de la naturaleza: en un determinado punto de nuestro descenso una pareja de nutrias ha estado jugueteando justo delante de nuestros kayaks. ¿Por qué la visión de animales salvajes en plena libertad despierta sensaciones tan vigorizantes?. ¿Será nuestro fondo ancestral de primitivos cazadores?.
- Colocando los calzos
- Demasiado turrón
- Poco después de ver una pareja de nutrias